Cuando las personas, en cualquier parte del mundo, se trasladan en ascensores, no se percatan del desarrollo tecnológico que posibilita su ascenso o descenso al interior de las diversas edificaciones que las personas visitan.
Sólo tienen una percepción inmediata derivada de los sentidos, esta percepción se refiere principalmente al entorno que representa la cabina, donde recordarán las características más visibles del aquel recinto, según sus componentes la podrán definir como antigua o moderna, dependiendo del elevador utilizado.
Desde que Elisha Otis inventó el paracaídas dejamos atrás la prehistoria de los elevadores e inauguramos la historia de ellos. Así como detrás de cada instalación de ascensores hay toneladas de material instalado, también hay millones de horas de trabajo en investigación y desarrollo, para generar mayores beneficios a los usuarios en términos de un menor desgaste de las partes y piezas de los elevadores, mejoramiento del confort de viaje y la eficiencia energética que pueden aportar a los edificios donde están instalados.
Crecen los edificios altos
Por otra parte, desde el año 2000 se triplica el número de edificios de gran altura por sobre los 200 metros – la mayoría de los países pueden exhibir sus edificios emblemáticos de altura -, sean estos comerciales, de vivienda, torres de comunicación y otros; aumentan las instalaciones de ascensores sin sala da máquina, lo que significa, mayor espacio disponible en metros cuadrados para el desarrollo de diferentes proyectos.
La persistencia en dotar a la industria de los elevadores de mayor seguridad y uso de las tecnologías de la información, la mantienen en un puesto de avanzada en el circuito de la actividad económica mundial.
Cintas Planas
También en el año 2000 Otis innova y patenta las cintas planas de acero recubiertas de poliuretano, hecho que transforma a la industria de los elevadores sustituyendo los cables de tracción convencionales por un nuevo sistema de suspensión. Ello no significa el destierro definitivo de los cables de tracción, los que gozan de un merecido espacio en el mercado.
Los técnicos de ascensores al realizar las inspecciones normales de los cables de acero requieren interrumpir el servicio de ascensor, mientras que el sistema de cintas viene asociado a una monitorización permanente de las mismas, para indicar su probable reposición de acuerdo con parámetros establecidos. El sistema de cintas tiene una durabilidad hasta tres veces más que los tradicionales cables de tracción.
Hemos de recordar que el sistema de paracaídas es de uso universal por todas las marcas de ascensores, lo mismo acontece con el nuevo sistema de suspensión mediante cintas.
“Todos los inventos humanos enaltecen la humanidad, y la industria de ascensores en la innovación tecnológica mantiene un lugar de vanguardia”.
Fuentes de referencia:
1. w.w.w. suractual.cl
2. w.w.w. diariodelaconstruccion.cl
3. wwwedicionesespeciales.elmercurio.com
4. Gen2 Comfort Brochure Alta resolución. Pdf.