Un Ascensor Espacial ¿Locura o Ciencia Ficción?

Con los Ojos en el Espacio

A inicios del siglo pasado volar era un sueño, pero desde los 50 en adelante ya estábamos internalizando la idea de ir al espacio. A fines de los 60 incluso el Hombre ya se sacaba fotos en la Luna. Las cosas van rápido cuando se cuenta con la motivación correcta y se dispone de los fondos necesarios para hacerlo posible.

Fue precisamente esta variable la que hizo que las potencias re-evaluaran los resultados. Programas como los continuos viajes de los transbordadores espaciales se suspendieron con el propósito de buscar nuevas tecnologías que abarataran los costos de ir al espacio. De momento, nuestra única presencia se reduce a la Estación Espacial Internacional, que en la actualidad orbita el planeta.

Pero ¿cómo hacer viable y rentable la experiencia de esta estación en el largo plazo? La respuesta a esta pregunta reside en la capacidad que tengamos de idear formas más económicas de ascender al espacio.

Ascensor Espacial

Se han estado ideando diversas formas de alcanzar las alturas donde la gravedad no afecte. Nuevas formas de despegue, cohetería más liviana, todo en manos de privados quienes ven en el espacio la nueva frontera a alcanzar.

Algunas motivaciones son: laboratorios químicos que permitan reacciones imposibles en presencia de gravedad, y muy por delante hacer que el ser humano común pasee contemplando los nuevos paisajes que la tecnología y costosos ticket permitan.

Aunque parezca increíble, una de estas ideas se basa en un concepto muy conocido para todos: Construir un ascensor que permita subir y bajar personas y cargas hasta la estación espacial u otras estructuras que en el futuro se construyan. Sin embargo, es mucho más sencillo decirlo que construir algo así. La sola idea representaría un desafío superior a cualquier ingenio visto hasta ahora. Cada detalle representaría un desafío tecnológico e ingenieril de insospechado alcance.

Sólo en cables se necesitaría cubrir más de 36 mil kilómetros, pero no cualquier cable. Tendría que ser en extremo liviano y resistente a la corrosión, impactos, radiación, etc.

Grafeno

Un material como ese parece de ciencia ficción, pero existe. Se llama GRAFENO, que es una sustancia artificial construida en base a carbono con estructura anular, que forman microtúbulos que parecen responder a todos los requerimientos. El problema es que no hemos logrado producirlo en las cantidades industriales que se necesitan para un proyecto de esta naturaleza. Si como hemos dicho, necesitamos 36 mil kilómetros de cables, nos encontramos con el golpe de realidad que nos dice que sólo hemos logrado producir 7 metros. Pero todo avance comenzó así, con el primer paso.

Un ascensor espacial no es sólo imaginación, ya se puso la idea sobre la mesa y tal parece será cuestión de tiempo verlo construido.

Algún día nos subiremos a una cabina, y una voz virtual nos preguntará “¿A qué piso va el señor?”, y nuestra respuesta será: “al espacio, por favor”